Luego de informarse de la marcha de la construcción, apreció los méritos de los constructores militares que trabajan con empeño para llevar a feliz término la sagrada obra revolucionaria abriendo con fe las vías para el cumplimiento de la meta en perspectiva por la prosperidad local.
Recorriendo las obras de construcción, se mostró muy complacido por su alta calidad.
Los establecimientos industriales, que se levantarán simultáneamente en 20 ciudades y distritos del país en el primer año de la revolución de la industria local, son expresiones directas de la civilización y desarrollo al estilo coreano y la síntesis de todo lo nuestro como conciencia, ideal, empeño, combatividad, dijo y enfatizó la necesidad de no admitir el menor defecto en esas creaciones que perdurarán como riquezas del pueblo.
Como insisto con frecuencia, lo más fundamental en la construcción es la calidad y es preciso que en todas las obras prevalezca la idea de que la tendencia de menospreciar la calidad pensando únicamente en la velocidad, por muy insignificante que parezca, menoscaba la política del PTC sobre la construcción local, apuntó.
Para fomentar el mejoramiento de la calidad en el sector de construcción, es importante elevar el papel de los obreros calificados, pero, antes que eso, constituye la condición primordial modernizar, estandarizar y normalizar todos los equipos de construcción desde las máquinas pesadas hasta las herramientas y dispositivos de diversos tipos que se llevan consigo los constructores, señaló y agregó que tomará las medidas sustanciales destinadas a aumentar decisivamente el porcentaje de máquinas en la construcción local.
Subrayó la necesidad de crear y fomentar el estilo de evaluar las construcciones estrictamente a tenor de los índices de calidad en las unidades militares movilizadas en ellas y los órganos de inspección y otros sectores correspondientes, y presentó las guías en materia de asegurar la calidad de las construcciones conforme a las demandas de diseño y métodos de trabajo en este dominio.
En el momento actual en que se amplía constantemente el ámbito de la construcción y se activa la campaña general de la construcción local, el sector de desarrollo prioritario es el de diseño, señaló y expresó la opinión sobre los principios generales que se debe mantener en el diseño de establecimientos industriales.
Luego de recorrer el campo constructivo, sostuvo una charla con los cuadros directivos acompañantes.
El éxito o no de la materialización de la política del Partido depende, por entero, de los cuadros directivos, recalcó y señaló algunas desviaciones que deben corregir sin falta en el método y modo de trabajo ellos quienes han de cumplir el papel conductor en todos los sectores de la revolución hacia la prosperidad integral del Estado.
Debido a la falta del estudio profundo de las actuales políticas partidistas y del entendimiento de la autóctona idea de estética arquitectónica y la importancia y características de los objetos de construcción, los funcionarios no hacen una dirección sustancial y profesional ni se liberan todavía de la dirección a modo de excursión y petulancia gritando consignas que no concuerdan con la mentalidad y edades de las masas, reprochó.
Al analizar tales fenómenos, destacó que cuando ellos estén versados en las políticas partidistas y tengan una actitud y punto de vista protagónicos en su cumplimiento, cada dirección sobre el terreno será útil e indispensable y política sobre la parte inferior.
Criticó también la emulación sin objetivos concretos que persiste todavía en el sector de construcción.
Si organizamos una competencia en este sector, ésta ha de ser promotora de la civilización y florecimiento del socialismo, dijo y añadió que la emulación por la velocidad, que impide el desarrollo cualitativo de la creación y construcción, no tiene nada que ver con el movimiento masivo de la actual época de la revolución.
Enseñó que las unidades militares, que asumieron la misión histórica del progreso local, deben organizar activamente los movimientos masivos de usos prácticos y significativos, que permitan elevar notablemente el nivel técnico de los oficiales y soldados, tales como la competición de capacidades, la formación de calificados, el mejoramiento de calidad y el arreglo de ambiente.
El Partido ha encargado al Ejército Popular el colosal y sagrado proceso histórico de transformación de las localidades, que se lleva adelante con las fuerzas propias, confiando firmemente en su fidelidad y combatividad, acotó y presentó las tareas generales para poner de pleno manifiesto el poderío del EPC en la honrosa campaña de construcción.
Por convertirlo en las filas vanguardistas perfectas en todos los aspectos, es importante realizar de manera ofensiva e innovadora la educación ideológica para infundir en los uniformados la conciencia de que ellos son creadores de bienes materiales del pueblo y forjadores de la nueva época civilizada, puntualizó.
El EPC debe hacer más honorables su imagen y fama de ejército revolucionario al poner en pleno juego las virtudes de la unidad entre el pueblo y el ejército compartiendo siempre las alegrías y penas con los habitantes locales como fuerzas armadas del pueblo y desarrollar activamente los movimientos masivos por hacer más trabajos provechosos para ellos, precisó.
Cada uniformado, que realiza las proezas brillantes al frente de la lucha de mediano y largo plazos, indicada por el Partido, es el soldado revolucionario más precioso, dijo y sugirió a los cuadros directivos del Partido y el gobierno y los comandantes militares que trabajaran con toda sinceridad para proporcionar a los constructores militares mejores condiciones de trabajo y vida más higiénicas.
Los comandantes de distintos niveles del EPC y los cuadros directivos del Partido y el gobierno tomaron la firme decisión de impulsar enérgicamente la materialización cabal y perfecta de la resolución del PTC mediante el servicio más fiel al pueblo y resultados magníficos, teniendo bien presente las instrucciones del estimado compañero