/ Actividades revolucionarias de Kim Jong Un,
Secretario General del PTC
Ri Il Hwan pronuncia despidida de duelo en la ceremonia fúnebre de Kim Ki Nam
  Pronunció la despedida del duelo en la ceremonia fúnebre del difunto Kim Ki Nam el miembro del Buró Político y secretario del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, Ri Il Hwan.
  Ri dijo que es difícil encontrar a un revolucionario veterano como Kim Ki Nam quien defendió la justeza de nuestra idea y causa con la postura siempre fiel que caracterizaba al funcionario importante del sector ideológico del partido que durante más de 60 años, vino conservando el linaje de la revolución coreana e impulsando su cumplimiento.
  Crecido como intelectual de la nueva Corea y funcionario medular del Partido en el regazo del Presidente Kim Il Sung, él fue siempre fiel a su líder, lo cual es la impresión más fuerte que nos ha dado su vida, apuntó y prosiguió:
  El difunto, quien pudo recibir y continuar sólo en el regazo del Partido y el líder su vida política y física, dedicó todo lo suyo al cumplimiento de la histórica causa para identificar todo el partido y toda la sociedad según el Kimilsungismo-Kimjongilismo.
  Teniendo de nacimiento la honestidad y fervor inusual, Kim pudo realizar méritos excepcionales con su capacidad inigualable en el sector ideológico de que no puede ocuparse cualquiera.
 Su lealtad ilimitada a la idea y causa del Partido estuvo perfectamente combinada con su honradez y rectitud, lo cual convierte su vida en un ejemplo para las generaciones venideras.
 El estimado compañero Kim Jong Un subió a la cima del monte Paektu junto con Kim Ki Nam en la ancianidad para darle alientos mentales y envió un emocionante mensaje autógrafo con motivo del 85º cumpleaños de él quien trabajó largo tiempo en el cargo responsable de gestionar la labor ideológica de todo el Partido.
 En ocasión del 90º aniversario de su cumpleaños, el Secretario General hizo otorgarle el título de Héroe del Trabajo, máximo honor para el ciudadano de la RPDC, llevando su vida a la cima de gloria y felicidad.
 Con el deseo de recompensar los favores del benefactor de la vida, Kim Ki Nam no dejó de escribir, pese a su edad nonagenaria, los libros para transmitir las verdades de la historia de que él ha sido testigo presencial.
 Aunque padecía de una enfermedad muy grave, solía encomendar que apoyaran bien al estimado compañero Kim Jong Un recogiendo su alma también.
 Al final, Ri expuso la decisión de acatar con fidelidad la guía del estimado compañero Kim Jong Un por el feliz término la revolución del Juche a que el finado ha dedicado toda su fuerza física y mental.
 Nuestro consuelo al difunto será precisamente el cumplimiento fiel de nuestra misión y deber que hemos asumido ante el Partido, la revolución, la patria y la posteridad, concluyó.