Andando por sendero entre parcelas
Entre ellas se encuentra la granja de Migok, en la ciudad Sariwon de la provincia agrícola Hwanghae del Norte.
Él la recorrió varias veces, para iluminar a las claras el camino a seguir.
En otoño de 2009, esta granja obtuvo una rica cosecha sin precedentes.
Informado de ello, él se alegró más que nadie.
Volvió a visitarla el 8 de octubre del mismo año, ocasión durante la cual contemplando la llanura cubierta con cereales y frutas bien maduras, afirmó que el paisaje de rico otoño es el espectacular visto sólo en nuestro campo socialista. Dijo además que el problema de semillas es uno de los más importantes para incrementar con rapidez la producción agrícola y que la granja debe introducir ampliamente mejores variedades de alto rendimiento y convenientes a las características locales.
Meses después, o sea, en marzo del año siguiente, él se personó de nuevo en esta granja.
Aquel día, habló de modo fácil de entender, del desarrollo de la agricultura tendente a no usar los fertilizantes y sustancias agroquímicas y dio recomendaciones de introducir de modo activo nuevos métodos y técnicas de cultivo, incluyendo el orgánico. Subrayó que en nuestro país cuya área de labrantío está limitada, la vía para resolver el problema de alimentos consiste en elevar de modo decisivo el rendimiento por hectáreas y para ello, es preciso hacer científico y técnico el cultivo.
La imagen del gran Dirigente