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Cortadora prometedora
  Al acoger la temporada primaveral, se eleva más que nunca el interés por el atavío entre las personas.
  Los servidores de la Sastrería de Pongnam de la capital Pyongyang se empeñan por crear ligeros y elegantes vestidos bien convenientes a esta estación.
  Dice la cortadora Cha Su Gyong:
  "Son distintos el gusto y afición de las personas. En particular, las mujeres pretenden evitar la similitud de formas del vestuario en lo psicológico.
  Por eso, hacemos confecciones por método de combinar varios colores en buena armonía con el original para causar la sensación de que son distintas sus formas, aunque se hacen con el paño de la misma clase."



  Cha es la cortadora talentosa, pues crea o diseña bien prendas femeninas de nueva y particular forma modesta, pero elegante, mediante la combinación de distintas clases de tejido.
  Aunque es joven, ella atrae la atención de los especialistas, considerándose como prometedora proyectista del vestuario y cortadora.
  Siempre se esfuerza por diseñar trajes convenientes a la estética y sentimiento de nuestro pueblo y elevar la técnica de su confección.
  Tiene la firme concepción de que la calidad y el color del paño  deben estar bien armonizados en forma suave con el gusto de los clientes.
  Ella hizo intensos esfuerzos para crear nueva forma de vestidos, estudiando con afán la tendencia mundial de atavío y la armonía de diversos colores y calidad de la tela.
  En este proceso, llegó a concebir ropas de formas peculiares, nuevas, e incluso, apropiadas a las figuras.
  En la "Exposición Otoñal de Vestidos-2023", las criaturas de ella se evaluaron en alto por tener formas y adornos particulares, refinados y suaves.
  Con el orgullo de contribuir a la floreciente cultura de atavío a estilo nacional, la cortadora Cha se dedica hoy también con toda su pasión a la creación de nuevas formas del vestuario.